Esta semana comienza el rodaje de la coproducción entre Francia, Italia y Suiza Un été brûlant (lit. Un verano ardiente), dirigida por Philippe Garrel. El cineasta de 62 años, cuyas cuatro últimas cintas fueron presentadas en competición en Venecia (El viento de la noche en 1999, Inocencia salvaje en 2001 y Los amantes habituales en 2005, ganadora del León de Plata al mejor director) y en Cannes (La frontera del alba en 2008) eligió esta vez para encabezar el reparto de su nuevo trabajo a la italiana Monica Bellucci y Louis Garrel (que colabora con su padre por tercera vez). El guión, obra del realizador junto a Marc Chodolenko y Caroline Deruas, narra el tormento amoroso de un pintor que es abandonado por su mujer, una actriz. La película comienza con el suicidio del protagonista en un accidente de auto y evocará mediante flash-backs esta tumultuosa relación. Una exploración de la precariedad de los sentimientos y la vida que se efectuará, como es habitual en el director, a través de diálogos reducidos al mínimo necesario, silencios y atmósferas intimistas. Un proyecto que el mismo Garrel resume así: “Por el arte, luchamos por la eternidad; pero eso no sirve de nada porque somos mortales. “ Esta producción de Edouard Weil para Rectangle Productions (que produce un segundo filme con Garrel) ha contado con un presupuesto de 3,1 millones de euros, que incluye la coproducción de Italia (Faro Film - 26%) y Suiza (Prince Film - 11%), un adelanto sobre ingresos del Centro Nacional de Cine de Francia (CNC), la subvención del Ministerio de Cultura italiano y la Oficina Federal de la Cultura (OFC), 400.000 euros de Eurimages y 192.000 euros de la región Isla de Francia. Las ocho semanas de rodaje se desarrollarán entre Roma y París y sus alrededores. La distribución en Francia y las ventas internacionales estarán a cargo de Wild Bunch.