Había mucho interés por conocer el nuevo film de Christophe Honoré, Non ma fille, tu n'iras pas danser y la interpretación de su actriz principal, Chiara Mastroianni, hija de Catherine Deneuve y Marcelo Mastroianni. El resultado no fue apreciado en el pase exclusivo para la prensa donde recibió algunos silbidos al finalizar la proyección. Sin embargo Nanjing Nanjing, de Lu Chuan, fue acogida con entusiasmo en justo reconocimiento a una historia dura pero contada con una delicadeza maravillosa. La película china, basada en hechos reales, cuenta la masacre producida en 1937 en la ciudad de Nanjing por la ocupación nipona. Tras la conquista del territorio se formará un gueto con refugiados chinos que se verá continuamente asediado por las tropas japonesas. Violaciones, asesinatos, desprecios, hambre... Horrores que sufrieron mayoritariamente mujeres y niños; una historia que merecía ser contada. Impresionante es la paliza que recibes al ver esta película china, estrenada antes en Toronto, a cada escena de masacre o de violacion. El público aplaudió dos veces, la primera al acabar la pelicula, como aliviados por las risas del niño superviviente, y la segunda para rendir homenaje a este himno a la paz, al ver los retratos de los protagonistas de esta pelicula que encarnan personajes reales. Se trata de un film muy documentado pero de bajo presupuesto, que recibe el apoyo de los actores del reparto (grandes estrellas en China que trabajaron por un precio módico, incluso una de las protagonistas invirtió dinero par ayudar al director a acabarla). Destaca la valentia de los actores japoneses del elenco que fueron sometidos a muchísima presión participando en esta denuncia de unos de las mayores masacres de la historia, durante la invasión nipona de China. La eleccion del blanco y negro fue porque los hechos remontan a 70 años atrás y que el tiempo siempre borra los colores, también porque esa sangre derramada, debía según su autor ser negra. Hubo polémica también en China, si bien denuncia la gran injusticia, crueldad, e infierno que comete el invasor, ya que está contada a partir de la mirada de un soldado japonés, y para todos es evidente su sufrimiento y humanidad. Por lo tanto, para el gobierno chino eso se considera traición. En cambio un miembro de la familia imperial japonesa ha visto Nanjing Nanjing en secreto, y ha reconocido los hechos, cosa que al dia de hoy no se ha hecho oficialmente en Japón. Incluso el director ha recibido una propuesta para distribuir su pelicula en el país del Sol Naciente, y así tal vez crear un puente de reconciliación entre estos dos países. La mayoria de la documentación provino de diarios de soldados japoneses, testimonios de los que aún estan vivos, y muchísimo material fotográfico de esos soldados. También museos privados chinos han aportado su colaboración a esta película tan comprometida. La rueda de prensa ha contado con el director Lu Chuan y los actores Liu Ye y Quin Yan. El director y guionista comentó que deseaba contar esta película convencido de "que cualquiera podría haber sido un militar japonés, y son personas como nosotros". La dirección podría ser premiada en este Festival; no otorgarle algún premio sería cometer un grave error. La francesa Non ma fille, tu n'iras pas danser (No hija mía, no irás a bailar), también vista en Toronto, cuenta la difícil relación de una mujer, recién divorciada, con todo lo que le rodea. Su familia, su ex marido, su nuevo amor, su trabajo... todo le genera una crisis personal que le provoca cambios constantes de humor y un sentimiento de culpa excesiva. Es el de Honoré un film que no engancha. Al espectador le cuesta encontrar la empatía con la protagonista y en ningún momento se produce una relación película - público tan necesaria en cualquier film. Intenta ser un retrato muy realista de la condición de la mujer actual, de quien se espera que sea una buena madre, esposa, hija, trabajadora. La propia protagonista se impone la presión de ser una super mujer, y por eso se enfrenta al fracaso porque la meta es imposible. Renuncia incluso a sus hijos porque cree que es lo mejor para ellos. Nunca se libera de la sensacion de culpa. No parece que le den muchas oportunidad a Lena, ni en la película ya que todos la ven en el papel de la inmadura algo desequilibrada que nunca hace nada bien, o en la sala de proyección que tal vez no haya perdonado al director tanto realismo y el obligarnos a enfrentarnos a esa realidad de la condición femenina en la sociedad moderna de hoy. Aún hoy no se perdona fácilmente a una mujer que no permanezca y acepte su papel, ni ella misma se lo perdona, al igual que en la leyenda bretona narrada por el niño (tal vez el personaje más maduro de la historia) de aquella joven que muere tras un baile con el diablo por haber desobedecido a su padre al resistirse a casarse como lo manda la tradición. Cristophe Honoré, que estuvo acompañado en la rueda de prensa por la actriz Chiara Mastroianni, explicó que su película era una "historia de roles". Pese a que la sociedad ha avanzado mucho en este tema, seguimos cayendo en los roles: La mujer debe ocuparse de los hijos, la madre considera a su hermana su favorita por no montar escándalos, .... En las familias siguen existiendo estas ideas preconcebidas y superarlas costará mucho tiempo todavía. Chiara habló de la "culpabilidad de la mujer", una sensación que aún se mantiene y que está muy interiorizado en la sociedad francesa y posiblemente en todo el conjunto occidental.