El premio Louis Delluc, prestigioso galardón y sinónimo de gran calidad cinematográfica, será otorgado el 17 de diciembre por un jurado compuesto por críticos y personalidades del séptimo arte y presidido por Gilles Jacob. Ocho obras aspiran al título a la mejor película del año. Entre ellas, tres participantes en el pasado Festival de Cannes: Des hommes et des deux, de Xavier Beauvois; Tournée, de Mathieu Amalric, y La princesa de Montpensier, de Bertrand Tavernier. Otros dos títulos en competición fueron presentados en Cannes: la versión larga de Carlos, de Olivier Assayas, y Des filles en noir, de Jean-Paul Civeyrac. Completan la lista de los aspirantes: White Material, de Claire Denis (presentada en el Festival de Venecia en 2009); Misterios de Lisboa, de Raoul Ruiz (premiada en San Sebastián) y The Ghost Writer, de Roman Polanski (premio a la mejor dirección en la Berlinale de 2010). Como es sabido, el premio Louis-Delluc de 2009 fue a parar a Un profeta, de Jacques Audiard. Entre los candidatos de este año, solamente Bertrand Tavernier ya figura en el palmarés (galardonado en 1973 por El relojero de Saint-Paul). Seis largometrajes optan al título a la mejor ópera prima, entre los cuales tres han sido dirigidos por jóvenes directoras: Belle Épine, de Rebecca Zlotowski; Un poison violent, de Katell Quillévéré, y La vie au ranch, de Sophie Letourneur. Participan también en la competición Domaine, de Patrick Chiha; Une exécution ordinaire, de Marc Dugain, y Gainsbourg (vida de un héroe), de Joann Sfar.