- Es la película más deseada del año, una revisión del mítico musical de los años 60
- La de Romeo y Julieta es una historia que se repite a lo largo de los siglos y nunca deja de sorprender. Los personajes de Shakespeare siguen pasando por los mismos males de amores en el siglo XVI, en los años 60 y en la actualidad. Antes de estrenar su quinta película de la saga “Indiana Jones” (en 2021), Spielberg quiere llenar las reabiertas salas de cine con música, danza y color. Su nueva versión de West Side Story ya tiene fecha de estreno. Será el próximo 25 de diciembre.
A finales de los años 50, se estrenó en Broadway un musical rompedor en muchos sentidos, llamado “West Side Story”. Se trataba de una revisión del "mito" de Romeo y Julieta, la obra de teatro escrita por Shakespeare sobre dos jóvenes amantes que pertenecían a familias enfrentadas entre sí.
En esta ocasión, los Montesco y Capuleto no son familias sino bandas callejeras, y no viven en Verona sino en el peligroso Manhattan de los 60, donde las bandas rivalizaban por controlar los barrios.
El musical creado por Jerome Robbins sobre el libro de Arthur Laurents, con la fantástica música compuesta por Leonard Berstein, fue adaptado rápidamente al cine por Robert Wise (en 1961), director entre otros éxitos de La novicia rebelde / The Sound of Music (1965). Steven Spielberg, como muchos niños de su generación y siguientes, quedó fascinado por los bailes latinos en plena calle y la música febril de Berstein. La película se llevó 10 Oscars, incluido el de mejor película.
El maravilloso plantel de la West Side Story original está encabezado por Natalie Wood, con Richard Beymer, George Chakiris y Rita Moreno. Por su parte, Spielberg quería contar en el reparto con actores absolutamente latinos, como así ha sido. Recordemos que en la original, la banda de puertorriqueños eran actores blancos maquillados.
Rachel Zegler puede decir con toda propiedad que ha cumplido su sueño. Esta actriz, cantante y youtuber de Nueva Jersey, de 19 años, fue elegida en un casting de más de 30.000 aspirantes para dar vida a María, el personaje protagonista que en su día hizo Natalie Wood. Rachel es de origen colombiano, y en su instituto ya interpretó a María en una obra musical, así que conocía bien sus pasos.
Para las secuencias coreográficas, una pieza fundamental de la trama, Spielberg ha contado con la ayuda de Justin Peck, el coreógrafo residente del Ballet de Nueva York. Su guionista ha sido Tony Kushner, un riguroso dramaturgo con quien ya ha colaborado en Munich (2005) o Lincoln (2012), y cuya misión ha sido adaptar con verosimilitud los diálogos al lenguaje de hoy.
Todos estos ingredientes apuntan a que el musical de Spielberg será el gran éxito del año y favorito a todos los premios próximos. Tras la temporada de cierre y planicie en el mundo cinematográfico, un derroche de baile y música en la calle es mucho más que necesario, vital.
